Completamente amueblado, con todos los enseres de cocina, sabanas, toallas. Restaurado conservando sus materiales primitivos, como las tejas árabes, paredes encaladas, suelo de barro y el mismo mobiliario que antiguamente ocupaba este agradable y acogedor espacio. Cuenta con un jardín de 600m. y piscina comunitaria para los 3 alojamientos,de 6x3 m.; Un río, con peces y patos, atraviesa el edificio y hay un pequeño lago, nacimientos, fuentes y pilares, todo ello acompañado por una hermosa y muy andaluza flora, destacando los geranios, planta típica granadina que no puede faltar en este único y emblemático paraje.